Una Noche Contigo

Quisiera que tus ojos con su mudo lenguaje

desde su abismo dulce y acogedor silencio

me dejaran un día sin importar ni cuándo,

ni por qué, ni en qué vida llegar hasta la magia

de tu placer más íntimo.

Que tan solo una noche vinieras a mis brazos

y tu boca se abriera ávida de mis besos

que encontraran mis manos tus tesoros intactos

y todo mi universo vibrara en tu infinito.

Quisiera que tus ansias de amar establecieran

la mínima distancia entre tu alma y la mía

me dejaras entonces sin importar ni cuándo,

ni por qué, ni en qué vida fundirme en el incendio

vital de tus deseos.

Que tan solo una noche vinieras a mis brazos

desnudo el pensamiento de amores y de heridas

sedienta de un instante más acá de la aurora

y ebrios de sentimientos burlemos al destino.