Exactamente ahora, se están prestando
halagos
los dueños de la vida, que es decir de las
vidas
los que nunca llegaron donde mueren los
niños
de hambre, de epidemias y de frío
luego fingen angustia y ofrecen paliativos.
Los que levantan puentes o edificios
negocian carreteras con la plata del
pueblo
pero no los albañiles, ni otros bravos
obreros
los que mienten bondades, contratan
arquitectos
y sancionan las leyes que incumplen ellos
mismos.
Exactamente ahora, nos venden su prestigio,
sus credos, sus leyendas de principios y
ejemplos,
sus fotos de sonrisas con millones de
dientes.
Porque hoy está lloviendo y otra vez el
fantasma
asoma sus narices para arrasar con todo
despojar de la historia, la cultura y la calma
a los nadie, los nunca, los del voto en
silencio
y muestra la pobreza sus temblores de
miedo.
Exactamente ahora, en un hotel lujoso
duerme el zángano limpio, duerme el
zángano seco
abajo en el suburbio se desangra la pena
aprieta entre sus dientes un grito
tenebroso
y alberga en sus oídos las promesas de
siempre.
Exactamente ahora, les reclamo
Presidencias, Gobiernos… Dignidad para el
pueblo
porque veo a mi gente pagando su estadía
trabajando la tierra, educando,
construyendo
izando la bandera o forjando el acero.
Porque veo a mi gente que camina y camina
con la sangre caliente, con dolor en el
pecho
con un sueño en el alma y un canto de
esperanza.
Exactamente ahora, digo honor, digo
patria,
digo basta sectarios, digo amor, digo
pueblo.
Si el poema no sirve para abrir las mentes ,para sembrar reclamos ,sus versos quedan desteñidos.
ResponderEliminarGracias Nucha esa es la idea. el deber del poeta dar al lector también esa posibilidad.
ResponderEliminarresaltar la belleza y dejar claro que nada se hace sin sangre, nada se hace sin alma.